Para este ritual vamos a necesitar tres velas verdes, dos velas color lila, cinco velas amarillas, tres limones, agua de rió cogida a media noche junto a tres piedras del mismo rió, aceite de romero y cinco ramas de romero salvaje.
En la misma noche que hemos cogido el agua y las tres piedras vamos a encender la primera vela, que sera de color verde. Antes de encenderla vamos a untarla con el aceite de romero, mientras le pedimos al universo que nos devuelva: nuestra energía, nuestra alegría y nuestras ganas de vivir.
Al día siguiente vamos a encender una vela amarilla, pidiendo al universo que nos de luz en el alma y nos guié hacia el camino que nos corresponde.
El tercer día vamos a encender la vela lila, bien untada con aceite de romero, antes de las 00:00 de la noche. Por ejemplo a las 23:30 empezamos a llenar nuestra bañera, donde podremos veinticuatro gotas de aceite de romero. En un recipiente vamos a hervir el agua de rió y las tres piedras, cinco ramas de romero, el jugo de los tres limones. Las piel de los limones las vamos a trocear y poner en la bañera. Todo lo dejaremos hervir durante doce minutos, después de apagar el fuego vamos a añadirle doce gotas más de aceite de romero.
Se deja enfriar un poco y se vierte el agua de romero en la bañera, durante el baño encenderás una vela verde y una amarilla bien untadas con aceite de romero, y recorras todo tu cuerpo con las piedras de rió pidiendo al universo que vuelva tu energía y tu pasión para la vida.
Las demás velas las vas encendiendo a tu gusto , tu alma te guiara.
Que el universo escuche tu petición